Luego de casi 4 años sin internet, 3 años sin smartphone y 1 tratando de recuperar esta cuenta, al fin regresé 🥳🙃
It’s time to clean this place.
Bye! 💋
Luego de casi 4 años sin internet, 3 años sin smartphone y 1 tratando de recuperar esta cuenta, al fin regresé 🥳🙃
It’s time to clean this place.
Bye! 💋
Para celebrar los 5 años del blog, nada mejor que algo de comer, por eso les presento esta cosa tan linda, con uno de los alimentos más nobles que nos regaló la Madre África, el plátano. Y cuando hablo de plátano no me refiero a la banana (cambur o guineo en Venezuela), sino al llamado plátano macho.
Rico en hidratos de carbonos complejos, fibra, potasio y magnesio, el platano verde es popular por su consumo en forma de tajadas o chips freídas en aceite (muy sabrosas con sal y ajo) pero también puede consumirse hervido, en puré, en sopa tipo crema o así, en pan, una forma novedosa que se ha hecho popular debido a la situación de Venezuela, la cual no es secreto para (casi) nadie. Y mientras hay quienes se quejan y no ven salida, otros decidimos ponernos creativos con nuestros recursos alimenticios y económicos. Fue gracias a esas personas creativas que me topé con esta receta.
Para hacer tu Pan de Plátano necesitarás:
• 2 plátanos verdes
• 2-3 huevos
• 1-2 cucharaditas de bicarbonato o polvo de hornear
• Sal a gusto
• 1 cucharada de Mantequilla derretida (opcional, se puede sustituir con aceite)
• 2 cucharadas de queso madurado rallado (opcional)
• Molde (yo use uno para pan de sándwich, pero usa el que tengas) el cual deberás engrasar y enharinar a tu gusto
• Licuadora, rallador o procesador de alimentos
Preparación:
Pela los plátanos y cortalos en trozos pequeños que quepan en tu licuadora o procesador. Sino, rallalos por la parte delgada.
A estos les vas a agregar el resto de los ingredientes y vas a procesar hasta que te quede una mezcla homogénea. Si tienes problemas para que el plátano se procese, apaga tu aparato y mueve un poco las piezas hacia abajo, puedes ayudar mezclando un poco SIEMPRE CON LA LICUADORA O PROCESADOR APAGADO o puedes hacerlo por tandas para no forzar tu equipo.
Esta mezcla deberás pasarla al molde ya preparado y llevarla al horno por unos 40-60 minutos a fuego medio alto o hasta que al introducir un palito este salga limpio.
Al estar listo, desmolda y deja que enfríe completamente antes de cortar y listo, tienes tu pan de plátano, sin gluten, sin harinas refinadas y súper sabroso y nutritivo.
Con queso fresco y mantequilla es delicioso 😛
Si te atreves a hacerlo con plátano maduro o amarillo o esta versión ¡dime que tal te fue! Te aseguro será genial 🙂
¡Besos de coco!
Pecho abierto, pulsante.
El corazón arde, el aire escasea.
La cabeza, hecha piedra, vuela siempre sobre el mismo lugar, sobre el mismo terror. La incertidumbre nunca duerme.
Porque siempre me preparo para lo peor. Me siento dueña de los finales tristes, de las mentiras edulcoradas, de las traiciones glorificadas. Ofelia hecha carne.
•••
Derrotada, solitaria, con la vida que no fue manchando mis manos y piernas, veo la realidad. Hoy aprendí que la cobardía se hereda y que el confort personal vale más que los corazones heridos y los sueños rotos. Que mi espacio esta dado, mientras no intente hacerlo más cómodo y seguro, que la nobleza y la paciencia son inútiles con las mulas cuando ellas creen que comiendo paja están mejor que comiendo maíz.
ORTOTANASIA(…) el derecho del paciente a morir dignamente, sin el empleo de medios desproporcionados y extraordinarios para mantener la vida. En este sentido, ante enfermedades incurables y terminales se debe procurar que se actúe con tratamientos paliativos para evitar sufrimientos, recurriendo a medidas razonables hasta que llegue la muerte
Cuando mi madre me contaba este, me dijo » recordé lo que me decías sobre el derecho a vivir decentemente lo que queda de vida» y es en momentos de crisis es que me doy cuenta que mi mamá si me escucha cuando hablo sobre no forzar la vida sobre nadie para evitarle sufrimientos a terceras partes. Honestamente pensaba que no lo hacía, ya que siempre me cambiaba el tema o me mandaba a cerrar la boca, tal vez porque hablaba de mi propia muerte y cómo quiero que sea el proceso si otra persona debe decidir por mi.
«Haya luz y luz hubo» pero soy rápida desenroscando bombillos y bajando cortinas, así aprendí a mantenerme oculta entre rincones y espacios vacíos que nadie mira. Por temporadas es hermoso pasar desapercibida, pero debo ser honesta: necesito atención y cariño, de vez en cuando con mucha frecuencia, así que sumé valor y decidí dejarme ver, primero una sonrisa incómoda, luego unas palabras, algunas risas, algunos abrazos.
Aprender a aceptar estar a la luz no es un proceso fácil, ya que al volverte visible de repente tienes gente a tu alrededor hablando, mirando, comentando lo que suponen que eres, que si una planta o un perro, hubieron quienes honestamente pensaban que yo era una cortina. Seguir leyendo Lumină